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Retención del huevo

 Los problemas con la puesta de huevos pueden ser comunes en ninfas, periquitos, agapornis y canarios. Recuerda que, en la naturaleza, estos pájaros simplemente encuentran una pareja y crían una familia. Y estos ejemplares de nuestros pájaros un Un pájaro que vive en interiores el que pone huevos, cuando no tiene un compañero o nido cerca, el hecho de que no eclosionen puede estimular al ave a poner más. Las cáscaras de huevo requieren una gran cantidad de calcio, y después de que se hayan puesto 5 o 6, el pájaro algunas veces no será capaz de ingerir suficiente calcio para continuar. 

Problemas en la puesta de huevos

 

Retención de huevos, el prolapso del oviducto, la peritonitis de huevo y la parálisis del obturador son todas consecuencias que pueden llegar a ser fatales. Las aves hembras que ponen muchos huevos pueden necesitar tratamiento con medicamentos recetados (orales e inyectables). 

Todas las madres ponedoras necesitan varias fuentes de calcio y un nivel adecuado de vitamina D3.

MASCOTAS CRIAR A MANO DIAMANTES MANDARIN

La cría a mano con estas especies tan pequeñas es muy complicada, porque los padres comen y regurgitan la comida y la convierten en una pasta que le dan a sus crías. Por ese motivo debereis de probar con el siguiente metodo, colocar una jaulita completamente pegada a la de los padres para controlar si los alimentan a través de las rejas, se les deberia poner algo que les diera un poco de calor... intentaría alimentarlos a mano, es muy esclavo y difícil por el tamaño de estos pollitos. Se les tiene que dar, cada dos horas y a medida que crezcan ir espaciando las tomas. Darles papilla para aves que se mezcla con agua mineral y se calienta al baño maría, se les tiene que dar a una temperatura no superior a los 37 grados, si estuviera demasiado caliente los podrías matar porque se les quema el buche. Se les da la papilla con una jeringuilla pero sin aguja, la cantidad sería muy pequeña y se tendría que controlar que la digieran bastante antes de la siguiente toma. Las papillas que hay en el mercado llevan las
indicaciones y las instrucciones para su correcta administración.

MASCOTAS DIAMANTE MANDARIN

El Diamante Mandarín o Poephila guttata mide 10 cm, nativo de Australia. Muy alegre y activo. Es un pájaro muy social, no puede vivir mucho tiempo en soledad, por que se moriría de pena, necesita estar en continua convivencia con otros mandarines, hay que adquirir mínimo dos: o dos hembras o una pareja, ya que dos machos estarían en continua pelea. Les gusta dormir en el nido aunque sean adultos, se sienten protegidos. Para la cría no les debe faltar nunca una o dos jibias y pasta de cría, para la formación del huevo y para que les dé energía porque se debilitan mucho. Los mandarines se alimentan de mijo y alpiste. El macho se diferencia de la hembra porque el macho tiene las mejillas coloradas. Les encanta bañarse. ¿Cuantos años vive un diamante mandarin? Pueden llegar a tener o durar 15 años de vida o edad.Cría Comenzará a construir su nido tan pronto como empiece a llover.El número de huevos de una puesta será de 3 a 7 por término medio, pero de hecho puede variar entre dos y ocho। Son de color blanco puro y su tamaño es asimismo variable, incluso dentro de una misma puesta, pero unos 15mm es la medida que cabe considerar como promedio. Los huevos son incubados por ambos pájaros, que cubren de forma sucesiva y alternada turnos de aproximadamente una hora y media. Cada uno de ellos abandona el nido al oír el canto de llamada de su pareja cuando ésta se aproxima y de este modo el relevo no tiene lugar en el interior. Durante la noche, en cambio, ambos pájaros permanecen dentro.
La incubación generalmente se inicia una vez que ha sido puesto el cuarto huevo (debe señalarse que la puesta se realiza a razón de un huevo cada día) y dura entre 12 y 15 días, lo cual depende de la temperatura reinante.Los jóvenes polluelos crecen con mucha rapidez y, según sea el grado de atención prestado por los padres por lo que a alimentación respecta, generalmente se hallan en condiciones de abandonar el nido al alcanzar las tres semanas de edad. Regresan sin embargo de forma continuada para pasar la noche junto a sus padres los cuales siguen dándoles de comer, con carácter reducido, hasta que tienen diez días más, en cuyo momento ya son plenamente independientes.